lunes, octubre 28, 2024

La sustancia


[Odiseas Posmodernas]

#EsdrasCamacho

“Juventud divino tesoro, ya te vas para no volver” es un verso de Rubén Darío en un poema llamado Canción de Otoño en primavera, allí con profunda nostalgia evoca el brío, la energía y las ilusiones propias de la mediana edad de todas las personas. 


 “Viejos los cerros y aun reverdecen” escuchaba decir a los mayores, escudándose de quienes le insinúan que no se tienen los arrestos ni el vigor para acometer nuevas aventuras, “más sabe el diablo por viejo, que por diablo”, contestaban también, cuando ya no le quedaban argumentos para aceptar que los años han pasado por él o ella.  


El capitalismo, con mayores recursos para el que pueda pagarlos, clama nuevos tiempos en las que la humanidad disfrute del hechizo de la belleza perpetua, se comercializa con exageración trucos, fármacos y chucherías.  Así se alimenta a las presas, persiguiendo consumiendo el estilo artificial aceptado por todos, el orden en que debería estar el mundo: la juventud eterna.


Oscar Wilde lo narró en su “Retrato de Dorian Grey”. En la búsqueda desenfrenada del placer y la negación de la responsabilidad moral, se es capaz de perder el alma. 


“Sustancia” es la película que en el 2024 aborda nuevamente el tema de la perfección inmortal humana, Elizabeth Sparkle (Demi Moore) a cierta edad ya no es rentable para los estándares que muestra la industria del espectáculo y la envían a la papelera de reciclaje. El reemplazo deberá saber también que tiene fecha de caducidad. 


¿Qué pasaría si hubiese la posibilidad de ser tú mismo, en una versión más joven”? Es la promesa con la que el personaje de ficción enfoca su destino.  A partir de la comprobación de que se está en una crisis a causa del envejecimiento, accede al consumo de la sustancia, una droga que le concede tener un clon. 


La critica cinematográfica augura que el filme ocupará un lugar entre los nuevos clásicos y muy seguramente será referente en un futuro cercano. 


El conflicto atrapa, pues es el drama constante de todos, el comprobar que luego de ser amanecer medio día, se está presenciando los albores del atardecer y oscuridad. A pocos les gusta aceptar su edad y sus consecuencias. 


Es una película bien hecha que tiene muy en claro la moraleja, el monstruo en que nos convertimos, al añorar la aceptación de todos. 


Es lo que hay en las realidades violentas de la actualidad. Por ello la mirada debería estar en alguna otra parte, en la que las obsesiones ordinarias no nos devoren. En el arte y la filosofía, por ejemplo. 


 Este último comentario óigase con música de fondo de Mercedes Sosa en “Todo cambia”: […]Cambia el pastor su rebaño/Y así como todo cambia/Que yo cambie no es extraño. 


Título original: The Substance

Año, 2024

Duración, 140 min.

País, Reino Unido Reino Unido

Dirección, Coralie Fargeat

Guion, Coralie Fargeat


No hay comentarios:

Publicar un comentario