martes, enero 29, 2019

Las alianzas

Las alianzas

Se nos ha dicho “más vale solo que mal acompañado y por esa creencia nos tardamos en comprender el verdadero significado de nuestra existencia: la cooperación.

La fiesta de la vida es de amor y el amor es construir sin celos.

La industria del consumo no percibe ganancias si actuamos en consenso, a través de los medios masivos de comunicación se promueve y se publicita la soltería eterna, la competitividad agresiva, esa obsesión nos ha hecho olvidar que estamos hechos para vivir en sociedad, en permanente conexión con nuestros congéneres, estableciendo alianzas.

Imagina que tienes un instrumento musical… ¿Cuál por ejemplo?. Empiezas tu sinfonía y es claro que es bella tu interpretación, pero si hay alguien más que te acompaña y añade coros y ritmos complementarios, en vez de empequeñecer tu melodía, la embellece.

¿Estás dispuesto a minimizar tu orgullo y dignidad, estableciendo coaliciones en las que quizá en corto plazo no obtengas tu beneficio, pero a la larga sí? Un comercial famoso en la televisión decía: “El tiempo es solo un pretexto”, pero el tiempo de verdad importa si ves que solo te tardarás el doble en obtener lo que deseas, te aconsejo reconsideres ese discutido tema del orgullo y la dignidad.

La vida es un riesgo y el que no arriesga no gana, ve tras tu éxito, pero compartido, en los peldaños que imaginas serán difíciles, estaremos ahí los que con madurez hemos asumido otra actitud ante la vida. Cero egoísmos, cero individualismos, para nosotros todo, si y solo si se construye juntos. 

En el tema del arte hay en la historia de la literatura universal un movimiento que atrajo la atención del mundo cuando amigos varios de distintos países del habla hispana lograron conmover y destacar a nivel global con un estilo similar a pesar de vivir en ciudades distintas, uno a otro se recomendaba, uno a otro se reconocía como discípulos del otro. El premio nobel de literatura Gabriel García Márquez siempre consideró la narrativa del Mexicano Juan Rulfo, como la más fiel del realismo mágico. Estos colegas escritores se agruparon en un movimiento artístico conocido como El boom latinoamericano.

Amigos, amigas, no esperes redacte un oficio membretado con logotipo y texto rimbombante en la que te pido te asocies conmigo en pos de nuestras metas, si quieres solo acércate a donde sientas que hay energía para transformar lo necesario a favor de la riqueza y prosperidad compartida.

Esdras Camacho Jagger
Motozintla Chiapas
 29/01/2019

domingo, enero 27, 2019

Crecer es aprender

Concibo la vida como una escalera de aprendizajes, cada peldaño te enseña y cada aprendizaje te convierte en otra persona.


Aprender es inspirarse, los que creen que ya todo está inventado se equivocan rotundamente, aunque creamos que no hay nada por hacer, la imaginación de algunos siempre nos está sorprendiendo. Por ello bien han futurizado que en dos décadas los que hoy son niños tendrán empleos que hoy día no concebimos como reales.


Como sujetos evolutivos requerimos transformarnos, adaptar y modificar según las circunstancias, nuestra racionalidad, imagina que viajases al pasado y llegaras por ejemplo al siglo XV o 16, de que manera harías entender a los habitantes de ese periodo lo que en tu entender es tan sencillo de resolver solo con tus conocimientos básicos o con el googlear la solución en la pc.


Si no ponemos en práctica la imaginación muy pronto estaremos pasando a otro nivel, el nivel de la decadencia y la caducidad, mantenernos siempre vigentes es la respuesta, sin embargo pocos entienden como y por donde empezar.


El científico e inventor Benjamin Franklin, que todos recordamos porque su cara aparece en el  billete de cien dólares estadounidenses ($100) es la mayor denominación actual del dólar estadounidense expresó claramente una verdad comprobable.  Vacía tu bolsillo en tu mente, y tu mente llenará tu bolsillo.


Si es cierto hay genios que han sorprendido por sus destrezas físicas o intelectuales sin necesidad de tocar un libro, pero en el conteo global no llega a ser una cifra notoria, quiero decir son muy pocos los que lo necesita, pero si tu fueras uno de esos genios, tampoco te quitaría talento leer más.


A través de la lectura refrescarás cosas que ya sabías y podrás también tener al alcance mejor oportunidad de responder en forma efectiva a los desafíos sociales cotidianos. Las personas que invierten su tiempo en leer están invirtiendo un recurso vital que mas temprano que tarde se convertirá en un beneficio de dimensiones extraordinarias.


Leer es también alimento, como seres espirituales no solo pensemos en el cuerpo sino también en el alma y nuestra alma para disfrutar con mayor intensidad requiere expandir sus horizontes .


No me lo creas, si quieres, pero si gustas, lee y sabrás.

martes, enero 22, 2019

¿Nos tomamos un café?


Ignoro el primer día que probé el café.


Mi madre decidió que tomásemos solo descafeinado, según porque a su papá le alteró los nervios, a ella también y no fuese a ser que a sus hijos también, por eso más le valía tomar las precauciones.

Mi abuelo el otro, seguía tomando café dulce y caliente, a veces a la orilla del fogón; su taza era especial, pues la habían comprado en la tradicional feria comercial del pueblo, grande y de cerámica dibujada artesanalmente, aunque tampoco era café real, ya no tomaba también le habían dicho que mesurara su consumo para que pudiese dormir bien.

Mi papá si tomaba café y cuando iba yo a visitarlo a su trabajo, había un termo de buen tamaño en donde él se servía y convidaba a invitados muy selectos, cuando íbamos a los restaurantes siempre adelantaba “quiero un café pero que sea de mata”, los meseros siempre ponían la cara de este provinciano y sus feos modos, pues en muchísimas partes aun siendo ciudades cafetícolas se consume el café soluble industrial.

Y esperaba un día probarlo, no obstante, había de pasar varios años, pues los niños no toman café. Ocurrió un día que  fui a Tuxtla a continuar mis estudios universitarios.

Entre los primeros lujos de la pseudoindependencia, fue ir a tomar un café al restaurante imperial enfrente del parque central, y de ahí terminé comprando mi propia cafetera para tomar las tazas necesarias, siempre con música ya sea imaginaria o real.

Un buen compañero en mis ratos de ocio ha sido el café, la música y por supuesto los libros. No es cliché, pero concibo ingrediente fundamental de mi felicidad tener eso.

A partir de eso fui conociendo adictos con similares intereses y empecé a conectar.

¡Los escritores toman, los periodistas, críticos de arte, cineastas analistas políticos, comunicadores, artistas todos consumen café! El elixir conecta talentos.

Luego fui explorando y conociendo que si el café es recalentado es feo, no solo por el color negro fundido, sino por el sabor caduco. Supe también que en varios lugares hay refill y si te rellenan la taza a cada rato, entonces no es buen café.

El café que dan en los velorios tampoco es bueno, pero uno tiene que poner cada de solemnidad y duelo pues tampoco fuiste solo a tomar café sino a acompañar a los dolientes.

Y el café siempre incita a desear, inspira a conectar.

Cuando alguien te dice ¿nos tomamos un café?, ese alguien ya tiene un 80 por ciento de aceptación anticipada en cualquier proyecto.

Un buen café es motivo sobrado para estar de buen humor.

Y me ha tocado decirle a alguien cuando me ofrece agua de calcetín, por favor hay que echarle más esencia, por supuesto si ese alguien es de confianza, sino pos a aligerar el trago y aguantar las circunstancias.

Haga frío o calor ando al cien con dos buenas tazas de café y si alguien me acusa de que me altera el humor, simplemente le dijo, tas bien ¡ENFERMO!.
Mis hijos toman un su poquito, para que no vayan a decir después que soy egoista, y espero nunca me vaya a hacer daño, pues entonces si, la ausencia de este aromático grano volvería mis días grises, incoloros e insaboros.