martes, diciembre 18, 2012

EL AMIGO

Recuerdo el sentimiento que me provocaba escucharte decir que eramos ya dos viejos amigos, y  suspirar diciendi henos aquí. 

Inservible a estas alturas solicitar una correción, demandar nuevamente una aclaración, para ti, eso soy, punto y simple. 

Naturalmente ni ofende ni indigna. 

Aunque solo para mi, estas son mis apreciaciones: 

1.- Un amigo no ha tenido acercamientos, ni intimidad física... Digo. 

2.- Te quiere, no te ama. 

3.- Desea lo mejor para ti, blah, blah, blah, blah. 

4.- Comparte el momento, los momentos, los recuerdos, es sacrificado, benévolo, cariñoso, tierno, preocupado. 

5.- No le pones un nombre distinto en tu directorio telefónico del cel o agenda. 

6.- Obvio no le llamas AMOR, ¿o si?

7.- El  es el confidente, y algunas veces como se dice, oído mudo. 

Yo no creo ser, ni antes, ni después eso.

Mi alma, requeríría un trauma, exigiría una santa putiza ecxorsisarte. 

La manga del muerto mi nobleza, mi madurez, la manchada frase, aunque no sea conmigo, prefiero asi, antes que perderte, neeeeeeeeeeeee. 

Que si ayudo, que si escucho, que si comparto, que si estoy, que si contribuyo, pues si, pero aún no me queda el saco, por que no reúno características ni muchos ingredientes de os arriba descritos. 

Soy el pendejo que no supo quererte, que no sabe hacerlo, el que te ama y ya,  te ama con el instinto del demonio, te ama con enfermedad, el que no debería decírtelo  el que debería perder su rostro y su  vida, pues ya en el mundo son muchos los pendejos. Pero como todavía no le llega el tiempo, sigue siendo ese 

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